La tragedia se develó alrededor de las 3:45 de la madrugada, cuando un médico a cargo del SAR de Zapadores alertó a las fuerzas de Carabineros sobre la llegada de dos menores de edad heridos de bala a dicho centro médico.
Inmediatamente, la policía uniformada se desplazó al lugar para iniciar las primeras pesquisas. Entre las víctimas se encontraba un joven de 17 años, con un historial policial previo. El capitán de Carabineros, Luis Felipe Muñoz, confirmó que el estado de salud del adolescente es crítico, con un riesgo de vida considerable. El joven recibió un impacto de bala en el tórax y se conoció que tenía una orden de detención vigente por el delito de porte ilegal de armas de fuego.
En la escena del incidente, ubicada en las calles Santa Bárbara con Diego Silva Henríquez, la policía halló un vehículo abandonado que contenía un cargador de arma de fuego con 15 proyectiles de calibre 9 milímetros, además de un teléfono celular.
De acuerdo con los informes preliminares, el tiroteo habría ocurrido después de una persecución, y se sospecha que podría estar relacionado con un ajuste de cuentas entre bandas antagónicas. La investigación se encuentra en curso para determinar si la niña de 13 años tenía alguna vinculación con dicho ajuste de cuentas.
El joven herido fue trasladado de urgencia al Hospital San José, mientras que la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones asumió la responsabilidad de llevar a cabo las investigaciones pertinentes.
CVZ-RTL