Los vecinos de Romeral, cercano al lugar donde se perdió el rastro de los perros, estuvieron desconociendo su paradero hasta que los inspectores de seguridad pública del municipio local se involucraron en la búsqueda.
Maximiliano González, inspector de seguridad pública, explicó la situación: “El domingo, los perritos siguieron a los maratonistas que salieron a las siete de la mañana hacia Curicó, y cuando terminó la maratón, quedaron abandonados aquí, en Curicó”.
Ante la preocupación de la comunidad de Los Queñes, se estableció una colaboración entre vecinos y autoridades, iniciando la búsqueda el día lunes y logrando el exitoso hallazgo el día martes en la plaza local.
En relación con este reencuentro, Elizabeth Orrego, vecina de Los Queñes, expresó su alivio: “Ellos son de allá de Los Queñes, son perros que van a botar, y allá uno les da su comida y los cuida como más puede”. Además, señaló que, a pesar de estar algo debilitados por la travesía, los perritos fueron encontrados en buen estado.
La comunidad ahora se moviliza para brindarles a “Yolo” y “Ying Yang” una mejor calidad de vida. Según la Ley de Tenencia Responsable de Mascotas y Animales de Compañía (Ley Cholito), se consideran “perros comunitarios” a aquellos que no tienen un dueño específico, pero reciben cuidados básicos de la comunidad que los alimenta.
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