Con carácter de urgencia, la alcaldesa molinense, Priscilla Castillo, manifestó su preocupación por las consecuencias que dejó el sistema frontal que azotó a la zona y que dejó a 30 familias damnificadas en su territorio.
La jefa comunal aprovechó la reunión convocada por el Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, junto a su par de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, en Talca.
En la oportunidad, la alcaldesa partió comentando que, “en el antes de una emergencia, todavía tenemos mucho que avanzar”, recordando que, “ya está en vigencia la Ley 21.364, que obliga a partir del 7 de agosto tener la unidad de riesgo de desastre creada en los municipios. Como es habitual, el parlamento hace leyes sin financiamiento y esto es un ejemplo, porque nos obliga a contratar el personal, pero sin recursos adicionales. Lo que nos interesa es que se vayan haciendo programas que nos ayuden a hacer prevención”.
Respecto a la situación vivida en Molina, la alcaldesa Castillo señaló que, “tuvimos 30 viviendas inundadas, así que agradecemos el bono de enseres, porque llega a la gente y ellos saben en qué lo gastan”.
Sin embargo, también hizo ver que, “necesitamos preparar a nuestra gente, porque cuando uno revisa la ficha “FIBE” y el Informe Alfa, se va dando cuenta de que los equipos cometen errores en la información; entonces, es importante hacer una capacitación interna”.
De igual manera, destacó las viviendas de emergencia “que entrega el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED), porque son diferentes a las mediaguas comunes: vienen mucho más equipadas, con sistema eléctrico y hasta baño”.
Uno de los puntos que con más fuerza impulsó la alcaldesa fue que, “la Dirección de Vialidad del MOP nos tiene botadas a todas las comunas de la región del Maule. No tenemos empresa global hace más de un año”, afirmó enfáticamente.
En la cita, además recordó que, “mandaron a una compañía por unos 5 meses, que con suerte pasaba la máquina, no instalaba señaléticas ni podía instalar un puente; en definitiva, no sirvió para nada”.
A juicio de la jefa comunal, “eso es de una ineficiencia y burocracia que no merece la gente”, reiterando que “la respuesta de Vialidad es que tendremos que esperar un año más para tener recién un contrato”.
De igual forma, agradeció la disposición de la Gobernadora Regional y el Consejo Regional, añadiendo que, “nos gustaría que existiera un fondo que nos permita contratar maquinaria y materiales para arreglar nuestros caminos, ya que quedó la escoba en los caminos vecinales”.
Por otra parte, en Molina el desborde de los ríos Lontué y Claro, afectó a localidades como Carrizal, La Valdesina y El Toro. Sin embargo, la alcaldesa explica que también hay problemas con uno de los principales rubros productivos de la comuna.
“El daño a la agricultura es tremendo y nuestros agricultores necesitan capital de trabajo. Por tanto, se necesita un bono para comprar semillas o arreglar terrenos. No basta sólo condonar las deudas, sino que debemos darle algún incentivo para que puedan salir de la tragedia”, declaró.
Por último, Priscilla Castillo recordó a los presentes que “en 1986, el Río Lontué dejó el desastre más grande en la historia local. Esta vez, nos salvamos por obra y gracia de Dios, de que casi 15 mil lontueninos fueran damnificados”.
Por tal motivo, insistió en que “necesitamos construir las defensas fluviales. Las de 1986 funcionan hasta hoy, pero tenemos actualmente problemas aguas abajo y es necesario construirlas para evitar un desastre. Estamos muy preocupados por las próximas lluvias, porque el río se puede salir en tres partes distintas”.
De igual manera, la jefa comunal de Molina señaló que “como Provincia de Curicó, necesitamos el embalse para Lontué; porque si bien hoy hay mucha agua, tendremos sequía en el verano. Nuestros agricultores están yendo al sur a sembrar, porque no hay agua”.