En 2019, surgió la innovadora propuesta que de la mano de la tecnología prometía proveer de agua a vecinos de la comuna de Curepto, con la conversión de aire en agua.
Un año más tarde, la iniciativa ya había conseguido la aprobación de su financiamiento, aunque sin su aprobación técnica de parte de algunas autoridades.
Los concejales Armando González y Fernando Alcántara, que en 2020 rechazaron la inversión financiada por el GORE, concuerdan en que no había certezas técnicas, económicas y operativas para respaldar su implementación en la comuna.
Desde su ejecución en 2020 y hasta la fecha, el millonario proyecto al cual sólo licitó una empresa, no logró generar una gota de agua debido a su ineficiencia técnica.
La presidenta de la organización social de El Membrillo, Zoila Herrera, lamentó que el generador y los paneles solares instalados hace tres años en la sede del sector, sólo ocasionen gastos en la cuenta de luz y no sean útiles para paliar la sequía como “nos ilusionamos todos”.
También se habilitaron paneles y otro generador en el patio trasero de la Escuela Pedro González, equipamiento que prometía producir entre ambas unidades, cerca de 3.600 litros diarios.
Hoy las onerosas máquinas permanecen inútiles ante el asombro y desconocimiento de los cureptanos, además de la desazón de cientas de familias que continúan dependiendo de la insuficiente agua que les provee un camión aljibe. “Nadie nos da una solución”, manifiesta la representante de la comunidad.
Pese a la insistencia por saber qué acciones adoptará la Municipalidad de Curepto, el alcalde René Concha como es de público conocimiento no quiso referirse al tema.
Y respecto a los concejales que tienen entre sus funciones la fiscalización, tampoco hubo pronunciamiento ante las consultas de la prensa.
En la última sesión del concejo municipal la materia tampoco fue abordada.
