En un esfuerzo conjunto entre el Obispado de Talca y la Municipalidad de Curicó, se ha concretado un trascendental contrato de usufructo para la Iglesia San Francisco. Con el liderazgo del Obispo Galo Fernández y el Alcalde Javier Muñoz, la iniciativa tiene como meta revitalizar el espacio para fomentar actividades culturales.
Mediante este contrato, la municipalidad de Curicó obtendrá el derecho de utilizar la totalidad de la iglesia, incluyendo sus ruinas, la gruta y las oficinas administrativas. Este acuerdo histórico involucra la participación de representantes religiosos, como el Vicario Episcopal Rodrigo Arriaga, junto con autoridades locales.
El Alcalde Muñoz enfatizó la importancia de este contrato tanto para el municipio como para la iglesia. Se llevarán a cabo dos proyectos fundamentales: la restauración del espacio destinado a oficinas de turismo y la integración de la iglesia en rutas turísticas de carácter religioso.
En este contexto, el Obispo de la Diócesis de Talca, Galo Fernández, subrayó la relevancia de este espacio. “La ciudad de Curicó se desarrolló en torno a la presencia franciscana, pero con el paso del tiempo, los terremotos y diversas eventualidades, la iglesia ha quedado en un estado ruinoso, incapaz de ser utilizado como espacio religioso”.
“Es por ello que hemos forjado esta alianza con la Municipalidad, cediendo el usufructo del espacio para que puedan implementar un proyecto de turismo religioso, abriendo los espacios y garantizando que la gruta sea el primer lugar disponible para la oración y la paz”, destacó la autoridad religiosa.
La Seremi de Cultura, Ángela Campos, elogió la iniciativa, resaltando la colaboración entre la Iglesia, la Municipalidad y el gobierno. La recuperación cultural de este lugar representa un paso significativo en la preservación del patrimonio.
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