Según el reporte, el epicentro del sismo se ubicó a unos 12 kilómetros al noreste de la ciudad de Saint-Louis du Sud.
Las autoridades locales reportaron daños estructurales en la ciudad de Jérémie y en la capital, Puerto Príncipe. La oficina de Protección Civil le dijo a varios medios que se habían presentado víctimas fatales y personas heridas.
“Puedo confirmar que hay muertos, pero aún no tengo un número exacto”, le dijo a la agencias de noticias AFP Jerry Chandler, director de esta oficina.
Por su parte, el primer ministro del país, Ariel Henry, señaló que la situación del país por el sismo es “dramática” y añadió que este había provocado “varias pérdidas de vidas humanas y materiales” en varios departamentos del país.
En su cuenta de Twitter, el primer ministro hizo un llamado a “al espíritu de solidaridad y compromiso de todos los haitianos” para afrontar “esta dramática situación que vivimos actualmente” a causa del terremoto que se registró este sábado.
Henry anunció que ha movilizado “a todo el equipo del Gobierno para adoptar urgentemente todas las medidas necesarias” y para evaluar “la situación en su conjunto”.
De acuerdo a la agencia de noticias AFP, en redes sociales las personas comenzaron a compartir imágenes de edificios afectados por el sismo en la región norte del país.
“Muchas casas están destruidas, personas muertas y algunas en el hospital”, dijo Christella Saint Hilaire, que vive cerca del epicentro a esta agencia de noticias.
Alerta de tsunami
Por su parte, la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. (NOAA) emitió este sábado una alerta de tsunami en algunas costas de Haití debido al fuerte sismo.
“Olas de tsunami que pueden llegar a uno o tres metros sobre el nivel de la marea son posibles en algunas costas de Haití”, indicó la NOAA, sin precisar zonas concretas del país.
Hace 11 años Haití fue víctima de un fuerte terremoto que dejó más de 200.000 muertos y 300.000 heridos.
Y este sismo se produce cuando Haití ya está sumido en crisis políticas, humanitarias y de seguridad.
Ocurre además un mes después del asesinato del presidente Jovenel Moise, mientras que franjas del país se enfrenta a un hambre creciente y los servicios de salud están colapsados por la pandemia del covid-19.
“¡Este país nunca encuentra un descanso! Cada año de la mala gestión no dolió, pero los efectos acumulativos nos hicieron vulnerable a todo “, dijo el empresario haitiano Marc Alain Boucicault en Twitter.
“Va a llevar años arreglar las cosas y ni siquiera hemos ¡empezado!”