Según señaló La Tercera, esta medida va dirigida principalmente para puestos de exclusiva confianza y para sueldos a honorarios.
En el caso de los sueldos de honorarios, estos no podrán superar el 50 o el 65 por ciento -en caso de que sean empleados con postgrado y al menos 15 años de experiencia en el servicio público- del sueldo del subsecretario de cada ministerio.
El documento “establece reglas de austeridad, probidad y transparencia para la contratación de personal a honorarios (…). Es un primer paso dentro del compromiso más global que asumimos de diseñar e implementar un sistema de remuneraciones al interior de la Administración del Estado que permita disminuir las actuales brechas, estableciendo límites a las altas rentas”.
En tanto los cargos de exclusiva confianza serán restringidos desde el tercer hasta cuarto grado de consanguinidad, incluyendo a convivientes.
El segundo instructivo señala que existe una “enorme desconfianza en las instituciones que vivimos, es necesario no solo cumplir de forma estricta con la ley vigente, sino también prestar atención a los flancos que la normativa actual deja y prevenir eventuales riesgos que dañen aún más la confianza de las personas en el Estado“.
Por esto se busca “impedir el contratar a parientes en ciertos casos, cuando se trate de parientes de ministros o subsecretarios hasta el cuarto grado de consanguinidad y segundo por afinidad, incluyendo a los convivientes civiles“, agrega el documento.