Aunque desde el Centro de Control de Enfermedades de China ya salieron a aclarar que fue un “completo malentendido” que su vacuna no tuviera tasas de protección muy altas, Heriberto García, jefe del Instituto de Salud Pública, también chequea y desmiente ciertos mitos en torno a la inoculación.
La bomba estalló temprano este domingo: el jefe de la agencia china de control de enfermedades dijo que las vacunas de ese país contra el Covid-19 no tenían tasas de protección muy altas y que evaluaban nuevas fórmulas para reforzar su efectividad.
A Chile la noticia llegó rápido, toda vez que justamente la china Sinovac ha sido la vacuna que más ha adquirido el país. Por eso, desde el Instituto de Salud Pública (ISP) salieron rápidamente a aclarar y poner paños fríos.
“Como en todo, siempre es el titular de la noticia y el titular sale de cualquier declaración y se quedan con una frase y eso es lo que pasó acá y menos mal se salió a aclarar inmediatamente. Se agradece que el CDC haya salido a aclarar. De todo lo que dijo, se quedaron con una sensación de eficacia que no era correcta”, dice a La Tercera Heriberto García, director del ISP.
En efecto, fue tanto el revuelo que causaron las palabras del líder del Centro de Enfermedades Contagiosas (CDC por su siglas en inglés) de China, que científicos y expertos de todo el mundo se alarmaron, lo que obligó al mismo personero, Gao Fu, a tener que aclarar que sus palabras se malinterpretaron.
“Hay que dejar claro que la vacuna Sinovac lo que ha demostrado es que logra su eficacia después de dos semanas de la segunda dosis. Los estudios de la Universidad (de Chile) y los que sacará el Minsal dicen lo mismo: se ha disminuido la cantidad de hospitalizados y enfermos. Eso es un buen camino”, agrega García.
El químico farmacéutico aclara que lo que se ha dicho, incluso desde Chile, es que las vacunas podrían requerir un refuerzo más adelante, “y eso está en estudio”, asegura.
“Sabemos que en el caso de CanSino, como ya pasó bastante tiempo desde el inicio del estudio clínico, ellos ya estaban viendo que se estaba bajando la cantidad de anticuerpos en las personas a medida que pasa el tiempo, como a los cinco o seis meses”, agrega.
El director del ISP asegura, además, que “en el caso de Sinovac y Pfizer hablan de que efectivamente ha ido disminuyendo la efectividad con el paso del tiempo en las personas ya vacunadas”. Y ejemplifica: “Pero así también ocurre con la vacuna de la influenza y por eso todos los años nos vacunamos. Es normal que las vacunas se comporten así, pero estamos en el contexto de una pandemia, donde se nota mucho más ese cambio y en una situación no se está pendiente de esto. Es normal que pasado el tiempo en las vacunas bajen los anticuerpos. Lo que aún no sabemos es el momento oportuno de ese refuerzo, pero estamos estudiando que probablemente se requiera un refuerzo de otra dosis, tercera o segunda, dependiendo de cada vacuna”.
En ese sentido, García asegura que es prematuro concluir hoy cuándo reforzar las dos dosis, pero que es algo que los investigadores están analizando. “Faltan antecedentes, datos y tiempo. En Chile se va a hacer mucho esta investigación, porque fuimos el país latinoamericano con mayor cobertura de Sinovac. Va a ser interesante ver en junio-julio cómo avanza esto”, señala.
El profesional cierra que, por el contrario, “no es prematuro (decir que es efectiva). Ya se ha visto cómo ha bajado la cantidad de pacientes UCI de mayores de 60 años. La mortalidad también disminuye, eso ya se puede ir observando. La vacuna es segura y los estudios así lo demuestran, sobre todo en los grupos de riesgo”.