La búsqueda de la concejala María Ignacia González tuvo este jueves un giro clave, luego de que la Policía de Investigaciones (PDI) realizara un operativo en la casa de los padres de Rodrigo Cancino, administrador municipal de Villa Alegre. Ese habría sido el último lugar donde se le vio a la concejala, tras una reunión con los dueños de casa.
En el marco de la investigación, el teléfono de Cancino fue incautado esta semana. Además, lleva tres días sin presentarse en el municipio. Pese a ello, desde la administración comunal aseguran que continúa cumpliendo funciones, aunque sin detallar desde dónde.
Durante la jornada, la PDI retiró diversos elementos desde el domicilio, los cuales serán sometidos a análisis. Llama la atención que, un día antes del operativo, funcionarios municipales acudieron al mismo lugar para retirar una carpeta cuyo contenido aún no ha sido aclarado.
El caso sigue bajo estricta reserva, mientras crecen las interrogantes sobre el rol de algunos actores cercanos a la autoridad desaparecida.
