La noche del sábado al domingo marcó el fin de la tensión, con el cumplimiento de protocolos de seguridad y la colaboración efectiva entre la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas y el SNAI. La entidad emitió un comunicado destacando el éxito de la operación y la liberación de todos los rehenes en los Centros de Privación de Libertad (CPL) a lo largo del país.
El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, quien ha enfrentado recientemente desafíos relacionados con bandas de narcotraficantes, confirmó personalmente la liberación de los rehenes en cárceles distribuidas en siete provincias, desde la frontera con Colombia hasta la de Perú.
En un gesto de reconocimiento, el mandatario felicitó a la fuerza pública, así como a sus ministros de Gobierno y Defensa, a través de sus redes sociales, por el éxito de la operación de rescate.
En un recuento previo, el SNAI había informado que aún permanecían 133 vigilantes y tres empleados administrativos como rehenes, después de la liberación de 41 personas el sábado, con la colaboración de la Iglesia católica en las negociaciones.
Cabe destacar que previamente se habían registrado otras liberaciones, y el jueves la autoridad carcelaria contabilizó 178 rehenes. Estos eventos se han producido en un contexto en el que diversas organizaciones buscan sembrar terror y ejercen su poder desde las cárceles, en respuesta a las políticas de mano firme implementadas por el gobierno de Noboa para hacer frente a estos grupos, transformando un país que hasta hace poco era considerado tranquilo.